Uno de los mejores descubrimientos que hice ahce unos años fué la cocina en olla lenta. Gasta muy poco, se consiguen platos realmente exquisitos, se gana tiempo y se pierden menos nutrientes con la cocción. ¿Quién puede dar mas?
No me parece tan importante que marca de olla se compre, todas son muy parecidas y las mayores diferencias se dan en la rapidez de calentamiento y el tamaño (y el precio). Yo tengo tres (por ahora): o slow coocker
Una Crock-Pot de 3’5 litros que fué la primera que tuve, allá por enero del2019. Es sencilla, analógica y cumple su función muy bien. Su tamaño es adecuado para ¾ personas o para una pareja que hace platos para dos veces, como es mi caso.
En julio de ese año me compré la “nachita”, la ollita de 1’5 litros de San Ignacio. Es difícil de conseguir porque se acaban enseguida, pero es una joyita. Ideal para calentar platos congelados o cocinar verduras. Es una olla lenta con todo el nombre y para una sola persona es perfecta.
En diciembre del mismo año me regalaron una Nova Laus de 3 litros. Muy buena y bonita, le he sacado mucho partido. No sé por qué ya no se vende, a mi me gusta mucho porque es algo más rápida al calentarse que las otras.
La cocina en este tipo de olla es muy sencilla y te permite tener la comida preparada al llegar la hora de consumirla. Desde un pollo al que solo le faltará un poquito de gratinado al horno para que quede crujiente hasta una fabada, todo se puede cocinar en estas estupendas ollas.